Signos Etéreos: Capítulo 29

El último capítulo de Signos Etéreos está aquí, y con ello el final de la primera etapa de vida del blog. Muchas gracias a todos los lectores interesados en esta primera obra de mi autoría, pero no se preocupen, ya que habrá más historias emocionantes aquí, en pagina Unno. Por lo pronto descubran el desenlace de esta gran aventura.

 

Nombre: Jacs Rengard
Residencia: Pueblo Sunabi

Jacs es un joven que fue criado por su madre y por sus abuelos en una granja en las afueras del pueblo Sunabi, situado a las orillas del bosque gris, por lo que se le considera uno de los asentamientos humanos más remotos. Aprendió el arte del combate con espada de su abuelo, quien desde pequeño tomó el papel de su padre después de que éste muriera repentinamente. Las razones de su muerte nunca le fueron revelta años después.

A la edad de 17 años su abuelo también muere en extrañas circunstancias por un asesino misterioso, lo que lo hace emprender un viaje para vengar la muerte de su querido abuelo. Es así como empieza su aventura…

Nombre: Kira Lenndraken

Residencia: Ciudad Paragon

Criada en el seno de una familia de hechiceros respetables de clase alta, aprendió desde muy temprana edad a usar la magia gracias a un riguroso entrenamiento para estar a la altura de las expectativas de su padre, quien antes de que ella y sus hermanas nacieran ansió tener un hijo varón que siguiera sus pasos para formar parte del consejo mundial de hechiceros.

Fuera de su carácter impaciente y temperamental, es una disciplinada estudiosa de la magia. A pesar de dominar y conocer muchos tipos de magias se especializa en magia de agua, a la que ha dominado a la perfección. 

Nombre: Valtron Molvus
Residencia: desconocida

Caza recompensas errante de pasado misterioso. Conoció a Jacs y a Kira luego de que Fragar lo contratase para matarlos, aunque durante la búsqueda de las esencias se unió al grupo renunciando así a Fragar, para luchar en su contra.

Es un personaje balanceado que emplea la espada y hechizos en combate a costa de no tener ninguna especialización.

Descripción de hechizos: 

Magia de la luz:

Rayo de luz: un poderoso rayo de luz con una fuerza destructora considerable.

Magia oscura:

Eclipse: crea una disminución antinatural del flujo de luz alrededor del hechicero que incrementa sus poderes mágicos negativos. Se dice que los hechiceros más poderosos pueden crear un verdadero eclipse cubriendo una zona del planeta, aunque por poco tiempo.

Choque de ira: conjuro que se alimenta del odio del hechicero. Entre más odio sienta, más poderoso será el hechizo.

Estrella oscura: esfera de energía oscura extremadamente poderosa.

Antimateria: poder que destruye la materia misma.

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Titulo: El fin de una era: el máximo poder de la luz

Escenario: En las afueras del castillo Nengram

Tiempo: Después de acabar el último capítulo

Personajes: Jacs, Kira, Valtron

Kira y Valtron, que habían regresado al lugar de la batalla para recuperar la esencia de la luz tuvieron que enfrentarse contra Fragar, quien apareció repentinamente cambiando sus planes. Después de una difícil batalla con el rey oscuro y cuando todo parecía perdido, Jacs hace acto de presencia para salvarlos en el último minuto, listo para relevar a sus compañeros en el combate final.

En el momento en el que Fragar está a punto de fulminar con un rayo de energía oscura a Kira, que yace indefensa de rodillas, demasiado fatigada como para moverse, un relámpago de luz se atraviesa en su camino anulando ambas energías creando un resplandor muy brillante que obliga a Fragar a cubrirse el rostro.

Fragar –Pero, ¡qué diablos fue eso! –exclama encolerizado al ver su ataque desaparecer en el aire.

De entre el polvo surge una silueta que camina hasta ellos. El reflejo de la hoja de la espada que porta pronto revela su identidad.

Kira -¡Jacs! ¡Estás vivo! –exclama eufórica apenas verlo.

Jacs acude en ayuda de Kira, ayudándola a levantarse. Cuando ella logra ponerse de pie se lanza a sus brazos. –Es verdad… ¡En verdad eres tú!

Jacs –Me da gusto haber llegado a tiempo. Lamento haberlos preocupado todo este tiempo, pero tuve que pasar un tiempo a solas para poder dominar la magia de la luz. De ahora en adelante yo me haré cargo de la batalla. Por cierto Valtron, logré recuperar tu magia de viento –agrega arrojándosela por el aire hasta caer a los pies de su herido amigo.

Fragar -Así que lograste regresar… eso significa que ahora Shinka debe de estar muerto. No puedo creer que el hombre que logró matar al guerrero fénix haya sido derrotado por un niño como tú. ¿Sabes?, de cierta forma me recuerdas a tu abuelo; al igual que tú, él me desafió años atrás, lo que casi le cuesta la vida. Después de eso huyó como la rata que era y terminó sus días escondiéndose como un cobarde.

Jacs –Te aseguro que si en algo soy diferente a mi abuelo, es que yo sí lograré vencerte de una buena vez por todas.

Fragar –Esta vez no tendré piedad. ¡RAYO OSCURO!

Jacs contesta el poder con un haz de luz igualmente poderoso -¡RAYO DE LUZ!

Al combinarse ambos poderes generan un gran estallido de energía cuando éstos hacen contacto. Jacs aprovecha el espectáculo de luces que provoca la colisión para tomar por sorpresa Fragar con su espada, quien logra anticiparse a sus movimientos esquivando así sus cortes. En cierto momento logra acorralar a Fragar entre la pared del risco y él. Sin otra defensa más que sus manos desnudas, Fragar interpone sus antebrazos que sorprendentemente parecen resistir los cortes de espada mientras sus ropas son rasgadas. Unas cuantas gotas de sangre oscura caen al suelo a causa de sus heridas.

Jacs se prepara para el segundo asalto cuando Fragar suelta una carcajada tras mirarse las heridas. -Debo admitir que en tan solo una semana has mejorado. Eres muy afortunado de haber sido salvado por ese anciano que vive en el exilio, pero no importa cuán bueno seas con la magia de la luz. ¡Yo he manejado la magia oscura por siglos! ¡Ahora contemplarán lo poderosa que la magia oscura es! ¡ECLIPSE!

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De entre sus ropas Fragar saca a relucir la esencia de la oscuridad a la que alza en dirección al cielo. Una tremenda cantidad de energía oscura empieza a irradiar desde la esencia cargando el ambiente de energía negativa. En ese momento los ojos de Fragar cambian de color blanco por un rojo sangre.

Jacs decide atacar en ese momento, pero apenas intenta acercarse a Fragar, una barrera invisible lo arroja en dirección contraria. Fragar desaparece delante de sus ojos y reaparece moviéndose a una velocidad inhumana detrás de él. Al mirar hacia atrás, Jacs apenas logra interponer su espada entre él y Fragar, quien lo ataca con una fuerza invisible que lo arrastra varios metros antes de caer pesadamente al suelo.

Fragar -¡CHOQUE DE IRA!

Intentando protegerse de los ataques cada vez más violentos de su adversario, Jacs crea una barrera de luz que lo pone a salvo de la tormenta de energía oscura a la que es sometido. Fragar maldice apretando los puños al ver que su hechizo no surtió el efecto esperado. –Pero,  ¡¿cómo es posible que haya logrado detener mi poder?! ¡No es posible que en tan poco tiempo haya dominado la magia de la luz!

Jacs –Ha llegado el momento de pelear en serio. Listo o no, ¡prepárate Fragar! Manteniendo su espada al frente, Jacs la alza en alto liberando así el hechizo que Genval había sellado en ella. En un instante su espada emite un brillo interior deslumbrante. A su alrededor despide pequeñas partículas de luz que se desprenden de la espada con cada movimiento que ejecuta.

Una vez cargada de energía su espada, Jacs la utiliza para atacar con ráfagas cortantes de luz. Fragar responde con rayos de oscuridad igualmente poderosos. Los estallidos provocados por el choque de ambas magias son tan potentes que Kira y Valtron deben mantener distancia del campo de batalla para no salir lastimados por los daños colaterales.

En medio del combate Fragar logra acercarse lo suficiente a Jacs para golpearlo con un poder oscuro que lo lanza hacia los escombros debajo del castillo. Acto seguido, destruye parte del risco para que escombros y piedras caigan sobre él, enterrándolo vivo.

Aún aturdido por el golpe anterior, Jacs no se percata del peligro en el que se encuentra hasta que ya es muy tarde, pero para su sorpresa las rocas se detienen en el aire por unos segundos que utiliza para apartarse de su camino. Una vez fuera de peligro escucha la voz de Valtron a sus espaldas: -Descuida, Jacs. Te cubriremos la espalda.

Fragar –Así que todavía sigues con vida, pequeña mosca molesta –brama mirando a Valtron con desprecio.

Sin previo aviso Fragar  entonces intenta atacarlo a él con un hechizo oscuro que es incapaz de terminar de conjurar a causa de cristales afilados que se entierran en su brazo

Kira –Tampoco se olviden de mí. Todavía tengo algunas energías para pelear.

Como si no sintiera dolor, Fragar se arranca los cristales del brazo como si nada y acomete contra Jacs a quien toma por el cuello para luego levantarlo en vilo con una sola mano. Acto seguido lo cubre con un flujo constante de energía oscura que fluye desde sus manos. Jacs deja escapar un grito de dolor. -¿No es delicioso el dolor de la oscuridad? Aunque hayas aprendido a usar la magia de la luz, sigues siendo sólo un niño comparado conmigo.

Kira – ¡Jacs! –grita frustrada y sin poder ayudarle.

Fragar entonces lo suelta repentinamente –No, no puedes morir de una forma tan patética. Les tengo algo especial reservado para ustedes. ¡Es hora del gran final! ¡ESTRELLA OSCURA!

Totalmente fuera de sí, Fragar alza las manos al aire atrayendo para sí grandes cantidades de energía osucra. Por encima de él las nubes empiezan a arremolinarse formando un huracán. Valtron y Kira corren a auxiliar a Jacs, que todavía se ve afectado por el ataque anterior  –Es… más resistente de lo que pensaba. Incluso con la magia de la luz parece que mis no parecen afectarle mucho.

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Kira toma la espada de Jacs, que estaba en el suelo emitiendo energía de luz para después entregársela.

–Quizá no podamos ayudarte directamente a acabar con él, Jacs, pero tal vez nuestra voluntad y espíritu pueda ayudarte.

Jacs –No entiendo… ¿A qué te refieres?

Kira –La persona que te ayudó encantó esta espada con magia de la luz, ¿no es cierto? Quizás si Valtron y yo unimos lo que queda de nuestro poder y lo sellamos en tu espada como lo hizo esa persona, el poder de tu espada aumente un poco más.

Valtron –Ya veo: la espada de Jacs también es un tesoro. Si colocamos en su espada el poder de nuestras esencias, podríamos tener una oportunidad para ganarle.

Jacs –Está bien, ¡hagámoslo! ¡No tenemos mucho tiempo!

Los tres sacan de sus tesoros sus respectivas esencias de viento, fuego, agua y luz para después colocarlas en el interior la gema roja de la espada. Entonces proceden a colocar sus manos en el mango de la espada para hechizarla al mismo tiempo. En el momento en el que la espada es infundida con la energía de los hechizos y es alimentada por las esencias en su interior, ésta parece volverse más larga, fusionando los espectros de las cuatro esencias hasta formar una hoja de un resplandor de luz blanca y pura. Con el nuevo poder, Jacs toma la espada entre sus manos.

Jacs –¡Con este poder podremos ganarle! –dice confiado mientras la sostiene con ambas manos.

Fragar muestra nuevamente su esencia alzándola en alto -¡ESTRELLA OSCURA!

Pronto, la tormenta de energía oscura se concentra en una esfera de poder que es capaz de distorsionar la luz a su alrededor. Cuando el conjuro está listo, Fragar lo lanza con todas sus fuerzas hacia Jacs y sus amigos.

Jacs se pone al frente para recibir el ataque con su espada, y con ella logra partir la esfera de energía en dos para después atacar con una ráfaga cargada de energía la cual Fragar recibe con su barrera mágica, que no logra resistir el golpe, colapsando al instante. La fuerza del ataque envía a Fragar a estrellarse  al pie de la pared de rocas de la cual emerge de inmediato con el rostro cubierto de sangre. -¡Cómo! ¡Cómo es posible que un niño como tú me haga eso! ¿Acaso no lo entiendes? ¡Yo soy Fragar, rey maldito! ¡Soy inmortal! Si se niegan a morir, entonces acabaré con ustedes y con todo este reino. Disfruten de sus últimos momentos de vida. ¡ANTIMATERIA!

Jacs -¡Qué fue lo que dijo!

Kira –Planea destruirnos junto con el reino entero. Jacs, ¡tienes que hacer algo ahora!, o de lo contrario todos moriremos.

Fragar se envuelve a sí mismo en su propia oscuridad creando alrededor de sí una esfera de poder oscuro creando un vacío a su alrededor. Lo mismo árboles, que rocas y aire son succionados hacia el interior del vórtice de oscuridad que crece a cada momento. Las personas del reino, así como los soldados miran con horror cómo se forma un agujero de oscuridad en el horizonte, cerca del castillo. -¡Que la oscuridad los devore a todos!

De entre las nubes se abre un agujero negro creando una puente de energía negativa entre el cielo y la tierra.

En medio de la tormenta, Jacs parece observar en completa calma la espada que sostiene entre manos y después de unos momentos de reflexión toma una decisión: –Amigos, quiero decirles que, si algo llegara a pasarme, me dio gusto conocerlos…

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Kira – ¡No digas tonterías! Sé que podrás lograrlo.

Jacs le sonríe antes de darle la espalda y marcharse al encuentro de la tormenta, que para entonces se ha convertido en una columna de energía negativa que destruye y absorbe todo a su alrededor. Jacs salta con todas sus fuerzas hacia la columna de energía y con su espada intenta rasgar la pared de oscuridad. La energía de la espada y de la columna oscura reacciona con violencia. Desde el interior de la columna Fragar observa los  esfuerzos de Jacs por intentar penetrar en la columna, por lo que intensifica su poder expandiendo las paredes del vórtice tragándose en el proceso a Jacs.

En un esfuerzo supremo, Jacs mantiene su posición en medio de la tormenta con la punta de su arma apuntando a Fragar. La gema roja de su espada empieza a brillar con intensidad a causa de la magia de la luz, causando que un resplandor dorado se expanda desde el interior del vórtice oscuro. Ambas magias, luz y oscuridad, parecen enfrascarse en una lucha por el control de la tormenta hasta convertirse en dos columnas de luz y oscuridad. Por un momento que parece eterno, ambas fuerzas opuestas parecen encontrar un equilibrio hasta que Jacs logra llegar hasta Fragar y enterrarle su espada en el corazón.

Jacs -¡Esto es por ti, abuelo! ¡Luz, dame todo tu poder!

De la espada emerge un rayo de luz que atraviesa el pecho de Fragar hasta el otro extremo. En un intento desesperado, Fragar intenta tomar la espada con las manos desnudas consiguiendo que la energía de luz desintegre sus manos apenas toca el filo de la hoja. Reuniendo todas sus fuerzas, Jacs amplifica el rayo de energía llevándose con él a Fragar, quien termina impactándose en los restos en pie de su castillo para después continuar su camino hasta perderse en las nubes del cielo.

Después de la batalla Jacs queda exhausto e intenta apoyar su peso en su espada para no caer.

Sin haberlo notado, habían estado luchando durante toda la noche, por lo que en pocos minutos la luz del sol naciente se perfila en el horizonte. En el aire puede respirarse tranquilidad por primera vez. De improviso, una legión de guerreros se acerca a ellos por detrás, y el hombre que los comanda, un soldado se hinca ante ellos seguido por los demás en señal de respeto y humildad. Es así como termina el reinado de Fagar

Ese mismo día, con el sol ascendiendo en el cielo de un nuevo día, Jacs Kira y Valtron viajan hacia el barranco que atraviesa el reino, cuyo fondo no logra avistarse y desde donde permanecen de pie. Sosteniendo la esencia oscura entre manos Jacs la deja caer al interior del barranco en una grieta angosta. –Esto no debe ser usado nunca más. –dice mientras la ve caer hasta perderse en las sombras.

Kira –Valtron, haz tu trabajo.

Valtron usa sus poderes de tierra para unir los dos extremos de las placas cerrando así la grieta. Nadie de los presentes parece notar que una figura oscura emerge de la grieta antes de que ésta se cierre por completo.

Kira rompe la seriedad del momento comentando: -Bueno, fue una gran aventura la que viví con ustedes, chicos, pero es hora de regresar a casa.

Jacs –Tienes razón –la apoya con una amplia sonrisa de satisfacción en el rostro.

Así pues, los tres valientes se dan la vuelta para emprender el largo viaje a casa.

Fin