Signos Etéreos: Capítulo 16

Signos Etereos o también conocido como Symbol Gods fue la primera novela que intenté escribir, es por ello que a lo largo del tiempo ha habido cambios, en especial el orden de sucesos que ocurren a partir de este capítulo.

Cuando escribí el primer borrador del capítulo 16, debo decir que no quedé satisfecho con el resultado, es por eso que durante la segunda revisión decidí añadir un encuentro dramático aunque breve con el villano principal de la trama, Fragar. Así mismo incluí dos personajes nativos de la isla en la que Jacs y sus amigos naufragan: Amanara y su hija. 

Nombre: Jacs Rengard
Residencia: Pueblo Sunabi

Jacs es un joven que fue criado por su madre y por sus abuelos en una granja en las afueras del pueblo Sunabi, situado a las orillas del bosque gris, por lo que se le considera uno de los asentamientos humanos más remotos. Aprendió el arte del combate con espada de su abuelo, quien desde pequeño tomó el papel de su padre después de que éste muriera repentinamente. Las razones de su muerte nunca le fueron revelta años después.

A la edad de 17 años su abuelo también muere en extrañas circunstancias por un asesino misterioso, lo que lo hace emprender un viaje para vengar la muerte de su querido abuelo. Es así como empieza su aventura…

Nombre: Kira Lenndraken

Residencia: Ciudad Paragon

Criada en el seno de una familia de hechiceros respetables de clase alta, aprendió desde muy temprana edad a usar la magia gracias a un riguroso entrenamiento para estar a la altura de las expectativas de su padre, quien antes de que ella y sus hermanas nacieran ansió tener un hijo varón que siguiera sus pasos para formar parte del consejo mundial de hechiceros.

Fuera de su carácter impaciente y temperamental, es una disciplinada estudiosa de la magia. A pesar de dominar y conocer muchos tipos de magias se especializa en magia de agua, a la que ha dominado a la perfección. 

Nombre: Valtron Molvus
Residencia: desconocida

Caza recompensas errante de pasado misterioso. Conoció a Jacs y a Kira luego de que Fragar lo contratase para matarlos, aunque durante la búsqueda de las esencias se unió al grupo renunciando así a Fragar, para luchar en su contra.

Es un personaje balanceado que emplea la espada y hechizos en combate a costa de no tener ninguna especialización.

Descripción de hechizos:

Magia de fuego:

Plasma:  rayo de fuego que supera los 3000 ºC. Su calor es tan fuerte que puede derretir rocas.  

 Magia de tierra:
 

Sub explosión:  energía de tierra concentrada que es enviada hacia un punto en específico concentrando su poder.

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Titulo: Naufragio en la isla desconocida: aparece el rey oscuro

Escenario: La isla tiburón

Tiempo: Al día siguiente?

Personajes: Jacs, Kira y Valtron

Antes de llegar al continente del éste, Jacs y compañía desembarcaron en la isla Mumbres, que fue atacada inesperadamente por piratas y aunque resultaron victoriosos, los tres cayeron al mar en medio de la confusión y se extraviaron antes de poder ser rescatados. Tras haber naufragado, el cuerpo de Jacs es arrastrado hasta la playa.

En poco tiempo, el sonido constante de las olas le hace recobrar lentamente la consciencia. Intentando orientarse, Jacs trata de recordar lo sucedido el día anterior, entonces recuerda la batalla entre los barcos y la marejada que los lanzó fuera del barco. Sus pensamientos cambian instantáneamente al recordar a sus compañeros. -¡Kira!, ¡Valtron! Tengo que encontrarlos pero, ¿dónde estarán?

Al buscar con la mirada alrededor de la playa de inmediato divisa un bulto del cual sobresale una espada en donde resulta estar enterrado Valtron, quien se encuentra inconsciente, muy cerca de él. Jacs le quita el exceso de arena e intenta despertarlo cuando en ese momento escucha un ruido apagado, no muy lejos de allí.

A unos cuantos metros se topa con las piernas de Kira sobresaliendo de entre la arena. Habiendo despertado su compañero, Jacs corre a auxiliarla halando de sus piernas hasta que logra sacarla completamente.

Una vez libre, Kira comienza a toser y escupir arena por la boca -¡Eres indestructible! –Exclama Jacs asombrado ante su resistencia-, ¿cómo pudiste pasar tanto tiempo enterrada de cabeza en la arena?

Valtron –Bueno, al menos estamos vivos –dando un vistazo a su alrededor mientras se sacude arena de sus ropas-. Parece que esta isla está deshabitada…

Jacs –Pues entonces tendremos que buscar la manera de salir de aquí.

Valtron –Primero deberíamos preocuparnos de encontrar alimento y construir un refugio. Mañana idearemos un plan para salir de aquí.

Durante el resto del día, los tres se dedican a buscar alimento y construir un refugio para pasar la noche. Usando su espada, Jacs corta varias palmeras que utilizan como madera para construir una choza rudimentaria; Valtron es el encargado de construir el techo con hojas, cortar los troncos y atarlos con lianas resistentes, mientras que Kira se dedica a pescar utilizando su magia de agua.

El día pasa rápido y el sol se oculta en el horizonte. Cenando a la luz de una fogata junto al campamento, los tres finalmente se relajan y discuten lo que harán al día siguiente.

Jacs–Podríamos usar esa magia de la burbuja que Kira empleó la otra vez.

Kira –Jacs, no sabemos a qué distancia ni en qué dirección se encuentra tierra firme. Además, ya te dije que ese tipo de hechizos consumen mucha energía y corremos el riesgo de terminar en medio de la nada. Ahora que tenemos la esencia sería más fácil, pero no podemos correr riesgos.

Jacs –Pero, ¡no podemos quedarnos en esta isla con los brazos cruzados!

Valtron –Podríamos hacer una balsa, pero sin una vela, no podríamos utilizar hechizos de viento para controlar su dirección. Terminaríamos igual si no sabemos hacia dónde queda la costa.

Jacs –Aun así creo que es la mejor opción. Podemos incluso llevar provisiones para varios días y guiarnos por las estrellas.

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Kira -¿Ah, sí? ¿Y acaso tú sabes navegar utilizando las estrellas?

Jacs –Pues… no… -admite, apenado.

Valtron –A menos que piensen quedarse el resto de su vida varados aquí, es la única opción que tenemos por ahora. Tomando en cuenta que la isla Mumbres no está a más de un día en barco,  debemos estar ya cerca del continente.

Kira –Bueno, pues si quieren lanzarse a alta mar, por mí está bien –dice en tono sarcástico y metiéndose en el refugio para dormir.

Sin darse cuenta, desde la espesura de la selva, un par de ojos los espía observando la escena.

En medio de la noche una figura oscura se acerca al refugio. Lentamente introduce su cabeza al interior para observarlos dormitar. El crujido de las hojas al caminar lo delata despertando a Valtron, quien de inmediato toma su espada y se planta frente al intruso. El ruido alerta a Jacs y a Kira despertándolos en el momento justo en el que Valtron sale del refujio detrás de la persona que los había estado observando.

Es entonces cuando Jacs se une a la persecución y logra darle alcance al intruso, derribándolo. Valtron y Kira no tardan en llegar al lugar. En el suelo yace un hombre de la selva que parece asustando ante su presencia, hablando en una lengua desconocida para ellos.

Valtron –Tal parece que esta isla no estaba deshabitada después de todo.

Repentinamente unos ruidos a su alrededor les advierten la presencia de gente cerca de allí. No muy lejos divisan un pequeño poblado con chozas en cuyas entradas hay fogatas todavía encendidas. Desde allí los nativos notan su presencia y centran su atención en ellos con los rostros llenos de temor.

Kira –Todo está bien. No parecen hostiles.

Jacs –Quizás estas personas puedan ayudarnos a construir un bote.

Kira –Tienes razón. Pero no veo cómo podamos comunicarnos con ellos.

Jacs –Déjamelo a mí –dando un paso al frente. Acto seguido, intenta explicarles con palabras su situación-: Hemos encallado en esta isla, y necesitamos de su ayuda para poder construir un barco.

Los aborígenes se limitan a escucharlo en silencio sin entender una sola palabra. Entonces una voz femenina se escucha. -¡Largo de aquí! Los forasteros no son bienvenidos en esta isla.

De pronto aparece mujer ataviada con ropas ligeras, plumaje y piedras brillantes. Detrás de ella la sigue una niña pequeña, de entre cuatro y seis años quien los mira timidamente. –Mi nombre es Amanara –asegura la mujer-, líder de esta tribu, y les ordeno que se vayan de la isla ahora mismo, o no me haré responsable de lo que pueda sucederles.

Kira –Oye, ¡pero qué te crees para hablarnos así! –dice dirigiéndose a ella-. No hemos hecho nada malo.

La líder de la tribu da un paso al frente para confrontarla, pero Jacs la detiene interponiéndose en su camino –Espera, Kira. Como ya dije antes, hemos llegado hasta aquí por accidente. Sólo queremos ayuda para poder salir de esta isla tan pronto como nos sea posible.

Amanara reflexiona la propuesta de Jacs  y accede -Está bien, pero primero necesitamos hablar en privado en mi choza.

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Haciendo un ademán con la mano, los tres la siguen hasta la choza más grande del lugar. Una vez a solas, la mujer se sienta en su imponente asiento de madera. –Antes que nada quiero que quede claro que cuando dejarán la isla en cuanto puedan, y no volverán a poner un pie aquí.

Valtron –Sólo por curiosidad, ¿por qué tanta prisa en sacarnos de aquí?

Amanara –Porque el oráculo de la tribu predijo que en estas fechas llegarían unos extraños que causarían la desgracia de nuestra tribu.

Jacs –Le puedo asegurar que no somos malas personas –espeta.

Amanara continúa sin hacer el menor caso a los comentarios de Jacs –Con todo, tendrán que cumplir su promesa y salir de su isla apenas les ayudemos a terminar su balsa –finaliza tajantemente. Entonces se levanta  dándoles la espalda para después dirigirse a otra habitación contigua dividida por cortinas. Entre tanto, los tres son llevados a una choza en la que son confinados por el resto de la noche y cuya entrada es custodiada por guerreros de la tribu.

A la mañana siguiente se les permite salir. En un esfuerzo conjunto entre los nativos y los tres, comienza la construcción de la balsa. Al medio día, el calor y el esfuerzo hacen que Kira se tome un descanso sentándose bajo una palmera. A su derecha nota que la niña que estaba siempre con Amanara le deja un tazón con frutas que pone a un lado suyo, pero apenas se da cuenta que Kira la ha descubierto echa a acorrer. -¡Gracias! –le corresponde ella a la niña pese a que ella ya se ha alejado.

Cuando la tarde llega la embarcación está lista junto con las provisiones necesarias.

Valtron –Parece que hemos terminado –dice enjugándose el sudor de su frente.

Amanara aparece de repente entre ellos –Les hemos dado provisiones para tres semanas y un buen barco. Ahora, como lo han prometido, deben irse.

Jacs –Gracias por todo. –acercándose hacia ella con una sonrisa mientras estira su mano para estrechar la de ella.

En un principio Amanara se rehúsa a estrechar su mano, pero al final accede de mala gana. El momento es interrumpido por el sonido de una fuerte explosión que proviene del pueblo.

Mientras corren por entre la selva en dirección al pueblo reparan en un espeso humo que parece provenir más adelante. Cuando por fin llegan al pueblo, ven pasmados un espectáculo de chozas en llamas y personas huyendo mientras unos seres incorpóreos los atacan. Sin perder tiempo, Jacs se prepara para pelean lanzándose hacia los enemigos con la furia de su espada. Pronto y sin ninguna ayuda, las criaturas desaparecen una a una cuando Jacs les toca con su espada.

Valtron -¿Qué son esas cosas?

Kira –No lo sé, pero sean lo que sean, no se ven muy fuertes.

Amanara -¡Son espíritus malignos! La profecía era cierta.

De entre el caos, la pequeña niña corre para reunirse con ellos. Inmediatamente se refugia en los brazos de Amanara.

Kira –Despreocúpate, nos encargaremos de esto.

Amanara -¡No! ¡Deben irse ahora! –alega tajantemente preparada para luchar.

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De entre la jungla emerge un soldado detrás de él sosteniendo un orbe negro que intenta atacarlos, pero Valtron lo reconoce y logra interceptarlo antes de que lo dañe. El hombre, al recibir un fuerte golpe en el estómago con la empuñadura de la espada de Valtron cae al suelo.

Valtron –Toguet, viejo amigo. Así que Fragar te mandó torturar a estas personas, ¿eh?

Toget –Ma… ¡maldito Valtron!, eres un traidor. El…él nunca te perdonará por eso.

Valtron –De todas formas pensaba matarme algún día, así que no tienes que preocuparte por mí.

En ese momento se acerca Kira al escuchar la conmoción -¿Acaso lo conoces, Valtron?

Valtron –Así es. Es un adivino de bajo rango del ejército de Fragar. Él y yo estuvimos trabajando en un par de misiones juntos, hasta que un día intentó tomar mis medallones y huir con ellos.

Kira  -No hay duda del por qué ustedes dos eran tan buenos amigos. Ladrón que roba a ladrón…

Toget –Puede que sea un hechicero de bajo nivel, ¡pero te aseguro que no te escaparás de esta tan fácilmente!

Tomando su orbe, lo lanza hacia el cielo, que inmediatamente libera una especie de vapor oscuro que comienza a condensarse.

Valtron -¡Jah! Tus amenazas no me asustan. –jactándose sin asomo de temor.

Togen echa a reir –Tan confiado como siempre, Valtron, pero tengo instrucciones de avisar al señor Fragar si alguna vez me topaba con ustedes. Ahora él sabe dónde se encuentran y viene hacia acá.

Valtron da un paso hacia atrás cuando asimila sus palabras -¡Qué acabas de decir! No puede ser, ¡tenemos que salir de aquí lo más pronto posible!

Jacs -¿Qué es eso? –dice al ver las nubes arremolinarse y volverse oscuras sobre de ellos. El vapor del orbe comienza a condensarse formando una figura.

??? –Demasiado tarde, Valtron –proclama una voz grave proveniente de entre los vapores oscuros.

Poco a poco el vapor comienza a dar forma a un hombre de aspecto demacrado, de ropajes negros, con hombreras de metal y con una capucha que le cubre parte del rostro. –No es posible. ¡De verdad está aquí! –exclama Valtron con asombro y nerviosismo.

Kira -¿Hablas en serio? ¡Estás diciendo que él es el famoso rey maldito! –señalando al hombre que acaba de aparecer.

Fragar –Así es. Mi nombre es Fragar, rey del mundo que conocen. Sabiendo esto, querer desatar mi ira desafiándome sería una estupidez, así que les sugiero que paren su búsqueda de las esencias ahora mismo y me entreguen al que se hace llamar Jacs Rengard, o de otro modo, perecerán.

Todos los presentes parecen temerle excepto Jacs –No sé quién seas, pero mientras no encuentre al asesino de mi abuelo, no desistiré en mi búsqueda de las esencias. Mi abuela me dijo que estaban relacionadas con su muerte y el asesino, así que tendrás que luchar conmigo si quieres detenerme.

Fragar dibuja una perversa sonrisa al escuchar a Jacs –Así que quieres al asesino de tu abuelo, ¿eh? Eres un Rengard, y como tal, tu destino es morir. Si tanto quieres venganza, aquí tienes a tu asesino frente a ti, muchacho –asevera con vos serena.

El impacto de sus palabras deja mudo a Jacs así como a sus amigos. Su asombro pronto se convierte en furia y, empuñando su espada fuertemente, intenta atacarlo con todas sus fuerzas -¡PLASMA!-.

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Jacs utiliza una columna de material incandescente contra Fragar, pero éste desvía el flujo del hechizo con facilidad interponiendo una sola mano. Con un solo dedo, Fragar contraataca con un hechizo oscuro que Jacs intenta compensar con un corte de su espada encantada con llamas, pero apenas las energías hacen contacto, Jacs es lanzado con fuerza a causa del ataque hasta una choza, destruyéndola con el impacto.

Jacs intenta reincorporarse rápidamente, pero su cuerpo no le responde.

Fragar entonces se le acerca lentamente. –Has de saber que no tendré compasión sabiendo que eres descendiente de un Rengard, pero por ahora no tienes que temer a la muerte, pues no pienso matarte por ahora. En vez de eso, los invito a ti y a tus amigos en mi castillo.

Armándose de valor, Kira corre hacia Jacs para auxiliarlo y ayudarle a levantarse.

A la escena se une Amanara, quien ataca a Fragar con magia de flora –Demonio, ¡no permitiré que lastimes a mí gente!

Los árboles de alrededor empiezan a moverse estirando sus ramos hacia Fragar, quien es estrujado por estas con violencia, pero una especie de energía oscura emana del capullo que las ramas habían formado a su alrededor hasta que éstas son destruidas por la energía.

Fragar –Espero que lo que están a punto de ver, es sólo una fracción de mi poder. ¡La vida de estos inocentes recaerá en su con ciencia! –amenaza alzando su mano al cielo. De ella, un espeso polvo oscuro comienza a caer por toda la isla.

Valtron – ¡Cúbranse! –alerta a sus amigos creando una zanja de tierra para protegerse.

Amanara junto con la niña intentan refugiarse mientras el polvo desciende sobre de ellos y al darse cuenta  de que no logrará salvarse protege con su propio cuerpo a la niña. Tanto Amanara como los nativos que son expuestos al polvo son convertidos en figuras de cera la cual comienza a derretirse hasta que sus rostros y cuerpos quedan reducidos a plastas apenas reconocibles

Jacs y compañía atestiguan con horror el espectáculo de muerte. -¡Maldito Fragar! –exclama, sintiéndose impotente.

En ese momento Valtron repara en algo inusual en Fragar, entonces comienza a conjurar un hechizo de tierra sin que su enemigo se dé cuenta de ello.

Mientras tanto Fragar se dirige a ellos:  –Por cierto, si de verdad quieren tener una posibilidad de ganarme, les recomiendo que obtengan primero la esencia de la luz; ninguna otra magia podrá ayudarles a derrotarme. Claro, eso si los espíritus del pasado no devoran sus cuerpos primero.

En ese instante, Valtron libera su poder hacia Fragar, quien es tomado por sorpresa con un ataque de tierra que logra quebrantar la esfera de cristal que se encontraba en su interior. -¡SUB EXPLOSIÓN!

En el momento en el que la esfera se rompe, la imagen de Fragar desaparece entre el vapor.

Valtron –Lo sabía, él no era el verdadero Fragar. Ese orbe era un simple comunicador que le permitía usar su magia a distancia y hacernos creer que de verdad estaba aquí, pero ese hechizo se destruye muy fácilmente si se destruye el orbe.

Kira –Apenas verlo sentí una opresión en el pecho. ¿Qué tipo de hechicería usaba?

Valtron –Esa es la magia oscura. Hasta ahora, no lo había visto emplearla…

Habiendo pasado el peligro, los aborígenes salen de sus escondites sólo para contemplar los restos de sus familiares y amigos convertidos en figuras de cera. Valtron camina hacia los restos del soldado de Fragar y antiguo enemigo suy, quien también fue víctima del poder de Fragar. El llanto se escucha debajo de una de las figuras de cera que guía a Kira hasta la niña.

Los ojos de Kira se arrastran cuando se da cuenta que Amanara era su madre, y que había muerto intentando protegerla. El barco zarpa con los últimos rayos del sol. En la parte frontal está sentado Jacs, que mira con tristeza la isla que acaban de dejar, en las escenas desgarradoras y en los llantos de la niña –Pagará por esto –dice para sí mismo-. Fragar pagará por esto.