Signos Etéreos, Segundo Tomo: Capítulo 5

Después de una parada imprevista, nuestros héroes han logrado sobrevivir un día más en la última frontera: el espacio exterior, pero como toda buena historia, los problemas no se hacen esperar cuando la nave falla y se precipita hacia un mundo desconocido. 

Aviso importante:

Debido a motivos personales la próxima semana no me será posible actualizar el blog, pero todo volverá a la normalidad el próximo viernes 18, así que estén pendientes con otra aventura más de Signos Etéreos. Agradezco a los lectores por su comprensión.

Nombre: Jacs Rengard
Residencia: Pueblo Sunabi

Jacs es un joven que fue criado por su madre y por sus abuelos en una granja en las afueras del pueblo Sunabi, situado a las orillas del bosque gris, por lo que se le considera uno de los asentamientos humanos más remotos. Aprendió el arte del combate con espada de su abuelo, quien desde pequeño tomó el papel de su padre después de que éste muriera repentinamente. Las razones de su muerte nunca le fueron revelta años después.

A la edad de 17 años su abuelo también muere en extrañas circunstancias por un asesino misterioso, lo que lo hace emprender un viaje para vengar la muerte de su querido abuelo. Es así como empieza su aventura…

Nombre: Kira Lenndraken

Residencia: Ciudad Paragon

Criada en el seno de una familia de hechiceros respetables de clase alta, aprendió desde muy temprana edad a usar la magia gracias a un riguroso entrenamiento para estar a la altura de las expectativas de su padre, quien antes de que ella y sus hermanas nacieran ansió tener un hijo varón que siguiera sus pasos para formar parte del consejo mundial de hechiceros.

Fuera de su carácter impaciente y temperamental, es una disciplinada estudiosa de la magia. A pesar de dominar y conocer muchos tipos de magias se especializa en magia de agua, a la que ha dominado a la perfección. 

Nombre: Valtron Molvus
Residencia: desconocida

Caza recompensas errante de pasado misterioso. Conoció a Jacs y a Kira luego de que Fragar lo contratase para matarlos, aunque durante la búsqueda de las esencias se unió al grupo renunciando así a Fragar, para luchar en su contra.

Es un personaje balanceado que emplea la espada y hechizos en combate a costa de no tener ninguna especialización.

Residencia: Planeta artificial M-17

Nombre: Milon Erconoz

Es el príncipe al mando de las fuerzas del planeta M-17. Después de llegar a la tierra, Milon ayuda a Jacs ya sus amigos durante una invasión de sus hombres. Él les advierte del peligro que corren al portar las esencias y les pide ayuda para detener a Quázar y sus aliados.

Es un líder nato, de carácter centrado que sabe mantener la sangre fría en situaciones difíciles, aunque sus habilidades en combate no sean sobresalientes.

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Titulo: Aterrizaje en el planeta desconocido: Parte 1

Escenario: Un planeta desconocido

Tiempo: desconocido

Personajes: Jacs, kira, valtron y Milon

En su camino al planeta Endorf la nave de Milon hizo una pequeña escala en un asteroide del que se vieron asediados por cazadores de recompensas espaciales. La persecución terminó abruptamente cuando perdieron el control de la nave y entraron en la atmósfera de un planeta desconocido.

La nave cae en picada a una velocidad vertiginosa hasta convertirse en una bola de fuego debido a la tremenda fricción generada. A pesar de las dificultades, Milon logra de alguna forma regular la velocidad a la que caen logrando así un aterrizaje forzoso muy accidentado en el que sus tripulantes pierden el conocimiento. Cuando la nave logra detenerse por completo se hace un silencio que pronto es perturbado por los sonidos de extrañas y pequeñas criaturas de cuello alargado que se acercan al lugar del accidente.

Kira es la primera en despertar. Lentamente abre los ojos al escuchar una especie de vocecillas a su alrededor. Confundida, abre lentamente a sus ojos sin saber dónde está. Pronto se ve encerrada en una jaula junto con sus amigos mientras es transportada por las pequeñas criaturas. Intenta moverse, pero descubre que sus manos y pies están fuertemente atadas.

Kira - ¡¿Qué está pasando aquí?! Do… ¿Dónde está mi medallón y mi tesoro?–grita histérica, lo cual despierta a sus compañeros.

Jacs - ¿Qué sucedió?, ¿dónde estamos?

Valtron - ¿Dónde están nuestras armas?

Milon - Parece que hemos sido capturados por una especie nativa del planeta mientras estábamos inconscientes.

Algunos de los seres fijan su atención en el interior de la jaula mientras los transportan, llenos de curiosidad.

-Parece bin que ya despertaron bin –dice una de ellas.

Milon - Por suerte no nos arrebataron los comunicadores que llevamos en nuestras cabezas.

- Ustedes bin invasores bin –interviene otro-, han entrado a un planeta el cual sirve a las ordenes de Liseme bin. Sus objetos de valor bin así como su nave espacial bin serán confiscados y esperarán la sentencia bin de nuestro líder bin.

Jacs – Esto es un error. ¡Nosotros aterrizamos aquí por accidente!

– Igual serán juzgados bin.

Kira - ¡¿Y crees que puedes quitarnos nuestras cosas y nuestra nave sin salir ileso, tonto?! – lo amenaza intentando sacar la cabeza por entre los barrotes, lo que atemoriza a la pequeña criatura.

Los cuatro son llevados como prisioneros al interior de una ciudadela alienígena al atardecer, en donde son encerrados en calabozos oscuros. Allí, las horas pasan mientras su hambre y cansancio aumentan.

Jacs – Parece que tienen planeado tenernos aquí mucho tiempo. –dice por fin con resignación.

-No cuenten con ello –alega una voz desde la otra celda.

Valtron - ¿Quién eres?

De las sombras, emerge una criatura similar a las que los capturaron seguida de otras dos. –Mi nombre es Celun, y soy un Ñuga. Esta es mi esposa y mi hijo.

Valtron –Bueno, al menos sabemos que no nos encerraron por ser extranjeros.

Celun –Antes que nada debo pedirles disculpas. Mi gente no siempre ha sido así. Es ese emperador llamado Líseme quien los controla haciéndolos competir por los escasos recursos del planeta mientras él acapara todo.

Kira – Espera, ¿tú sabes algo acerca de lo que piensan hacer con nosotros?

Celun –Por lo general los foráneos son enviados con Liseme para que le sirvan como esclavos o entrenados para su entretenimiento.

Jacs ¿Qué hay con nuestras pertenencias?

Celum –Me temo que todos sus bienes ya han sido confiscados o vendidos.

Jacs – Exactamente, ¿a qué te refieres exactamente con “entretenimiento”?

Celun – Cada treinta días se organiza en el coliseo un evento en el que guardias personales de Liseme y esclavos se enfrentan. El objetivo es destruirse los unos a los otros. Para su fortuna ustedes parecen fuertes.

Jacs -¿Qué quieres decir con eso?

Celun –Todos los prisioneros que participan en el torneo lo hacen con la promesa de que si ganan serán liberados… aunque para serles franco eso nunca ha ocurrido. Las luchas son muy desiguales, y hasta ahora todo el que ha intentado conseguir su libertad ha muerto.

Kira se deja caer en el suelo, con los brazos cruzados  –Si tuviésemos nuestras esencias, podríamos usar magia para ganar…

Valtron - ¿Cuándo empezará ese evento?

Celun – Mañana mismo. Todos los prisioneros debemos asistir.

Jacs  -Creo que no tenemos otra opción que intentarlo si queremos salir algún día de aquí.

Celun –Debo advertirles antes que, a diferencia de nosotros, la especie guerrera de nosotros los Ñuga es muy fuerte. Criaturas comunes como nosotros no tenemos oportunidad.

Jacs – Quizás tengamos algo de tiempo para prepararnos antes del combate de mañana.

Milon - ¿Cómo?

Jacs – Si alguno de nosotros logra obtener una fuente de magia, puede que logremos vencerlos. Afortunadamente ellos no me quitaron mis brazaletes. En ellos se encuentra un hechizo que me permite aumentar el poder de la magia de luz, aunque sin tesoro, mi magia será más débil.

Valtron  - Kira, creo que eres la única que puede encontrar una solución a esto.

Kira - ¿Yo? –responde sorprendida y algo incómoda ante la repentina atención.

Jacs – Kira, eres la única con el nivel de conocimientos para buscar una manera de poder usar magia sin recurrir a nuestros tesoros o medallones mágicos.

Al principio parece ponerse nerviosa, pero al final suspira con resignación. –Veamos… la magia sería muy débil si utilizamos materiales comunes –analiza-, pero si conseguimos un objeto de plata y lo marcamos con un símbolo mágico, y si unimos nuestras voluntades para sellar un hechizo en él… quizás podríamos utilizarlo para invocar magia.

Acto seguido observa a su alrededor en busca de algo que pueda servirles. Tirados en el piso encuentra dos pequeñas tapas de drenaje que arranca del piso. –Creo que esto nos puede servir como catalizador aunque no sea de plata.

Con ayuda de Valtron y Jacs logran marcar el símbolo de fuego y el agua en las tapas rayando su superficie.  Luego prosiguen a juntarse los cuatro alrededor de ellos con sus manos al frente para transferirles poder. Poco a poco, las marcas de los símbolos comienzan a reaccionar emitiendo una tenue luz. Después de horas en la misma posición, deciden hacer un alto para tomar un descanso.

Kira – Todo listo, ahora sólo es cuestión de dejarlos reposar por un tiempo. Con algo de suerte, podremos usar con ellos hechicería básica, aún así, necesito sellar el hechizo para que tengan la energía suficiente. Yo me encargaré de eso chicos. Descansen para estar en forma el día de mañana.

Llegan las primeras horas de la mañana. Jacs es el primero en despertar y en encontrar a Kira dormida en el suelo, sosteniendo todavía en las manos las tapas metálicas a las que les ha infundido más poder. Cuando está a punto de tomarlas con cuidado para no despertarla, una voz ronca se escucha detrás de él.

– ¡Ya es hora gusanos! –brama un Ñuga guerrero, que es más alto y más fornido que cualquiera de ellos

Jacs y los demás son llevados con todos los prisioneros a la arena, en donde espectadores de todo alrededor de la galaxia esperan el encuentro. Allí hace acto de presencia líseme, un ser enorme, con nariz de cerdo, cola de salamandra y aspecto amenazante se acomoda en su asiento antes de que comiencen los combates.

Liseme – Así que estos son los chicos nuevos... me parecen bastante feos. –dice observándolos desde su asiento.

Antes de comenzar, Liseme hace un anuncio: Bienvenidos sean a la arena, lugar en donde los seres más fuertes del sector se enfrentan en cruentas batallas en busca de su libertad. En esta ocasión tenemos unos invitados especiales –señalando al grupo de Jacs-, pues tenemos una especie nueva en nuestro repertorio de luchadores.

El torneo comienza en breve. Uno de los capataces elije a Valtron obligándolo a caminar al centro de la arena, en donde sus esposas son removidas mientras que los demás esclavos son llevados a un sitio desde donde pueden esperar su turno mientras ven el combate. Uno de los Ñuga le trae una charola repleta de armas rudimentarias, de donde Valtron escoge una especie de lanza con punta de cristal.

Valtron  es elegido como el primero para pelear mientras el resto es llevado a un palco donde esperan con los demás prisioneros su turno. Valtron es llevado al centro de la arena en donde le dan a escoger una variedad de armas locales para el combate, se decide finalmente por una especie de lanza.

Frente a él, un ser muy grande parecido a un rinoceronte escoge sus armas, las cuales son una gran hacha y un escudo – te haré picadillo, ¡pequeño insecto espacial!- lo amenaza lanzándole una mirada fría.

Desde los palcos, los demás prisioneros le animan. El combate comienza. Valtron toma la ofensiva listo para clavar su lanza contra el extraterrestre, quien se cubre con su escudo, pero antes de hacer contacto, Valtron repliega su punta para clavar la lanza en el suelo usándola a modo de vara con la que salta hasta quedar de espadas del enemigo, quien permanece con la cabeza agachada esperando el ataque frontal. Valtron entonces aprovecha para golpearlo en la cabeza con su lanza, cayendo fuera de combate La multitud enloquece.

Liseme – Interesante lo que pueden hacer estos hombres del espacio, ¿no es así, huma? –dice a uno de sus súbditos.

Humaa– Eso parece, señor. Quizás no sean tan inútiles después de todo.

Milon es el siguiente elegido, a quien le toca pelear con una fiera del planeta local que tiene por manos unas cuchillas muy afiladas y grandes alas de tipo insectoide en los brazos. Fiel a su naturaleza, Milon escoge una arma de energía que se usa a manera de guante como arma. Milon se ajusta el arma en el brazo cuando la criatura se lanza sobre él antes de que comience oficialmente el combate.

Tan rápido como puede esquiva las afiladas extremidades para después contraatacar con esferas de luz. Inesperadamente, la criatura bate sus alas tan rápidamente que el aire circundante se lleva las municiones del luz.

Milon - ¿Qué clase de cosa es esa? A este paso no voy a poder ganar...

Con las alas todavía en movimiento, la criatura arremete con sus cuchillas contra Milon, quien salta en el momento justo para saltar sobre su adversario al que le dispara directamente en la cabeza. Milon salta en el último momento, antes de que la criatura se estrelle de cabeza contra el muro de contención.

Aprovechando que el enemigo lucha por sacar su cuerno enterrado en la pared, Milon le ataca con su arma recibiendo de lleno todo el ataque entre sus gritos de dolor. Creyendo haber vencido y distraído por la multitud, la criatura aprovecha para soltarse y atacar a Milon en el abdomen con sus cuchillas que logran dañarle con un rasguño grande que penetra sus ropas hasta llegar a su piel.

Milon reacciona y de inmediato toma uno de los brazos del extraterrestre para después dispararle directo en la coyuntura que lo une con el resto de su cuerpo. Habiéndose apoderado de una de sus armas, Milon la utiliza para cortar el abdomen del extraterrestre en dos cayendo finalmente vencido.

Liseme - ¡Imposible!, ¿Cómo es que ha podido con él? –exclama con incredulidad al levantarse abruptamente.

Humaa– Veamos si los alienígenas son tan fuertes como para vencer a nuestro guerrero más fuerte.

Llega el turno de Jacs para luchar, quien de inmediato toma arma una espada común. Por la puerta se asoma una criatura todavía más grande que la anterior, cubierta de pelo, con grandes colmillos y una cola que recuerda a la de un escorpión y en vez de brazos posee cuatro tentáculos.

-Puedo ver que tu carne es deliciosa, humano –le dice mostrando su lengua bifurcada.

-¡Tú puedes Jacs! –lo anima Kira desde las gradas.

Cuando comienza el combate la criatura lo ataca con sus tentáculos que usa a modo de látigos. Jacs esquiva todos los golpes y con gran velocidad atraviesa la distancia que los separa. Pronto logra llegar hasta quedar frente a su enemigo, y con un gran salto da un corte justo en medio de los ojos de su oponente. Jacs cae del otro lado dejando a su enemigo inmóvil hasta que, instantes después, el filo de su espada se mella.

Jacs - ¡¿Qué?!

La criatura se gira hacia él como si nada hubiese ocurrido atacándolo con sus tentáculos. Afortunadamente Jacs logra escapar de su alcance a tiempo para ponerse a salvo.

La bestia ríe – Mi piel es tan dura como el mejor de los aceros, niño. No podrás penetrarla con ningún tipo de arma como esas.

Al ver que su espada no surte efecto en su enemigo la tira al suelo, limitándose a esquivar sus ataques que se vuelven más agresivos.

Valtron  - Esto está mal, así nunca podrá ganarle a ese monstruo...

–Debemos ayudarle –dice Milon intentando cruzar la barda hacia la arena, pero uno de los soldados que los mantienen en constante vigilia se lo impide.- ¿A dónde crees que vas?, los combates son individuales así que siéntate a ver cómo tu amigo es devorado por nuestro mejor guerrero. –comenta en tono burlón el extraterrestre.

Sin poder contenerse más, Kira se levanta de un salto sacando de su bolsillo las tapas metálicas. – Es hora del plan B, ¡Jacs!, toma. –dice al tiempo que le arroja una a la arena

Jacs la recoge de inmediato –¡Es hora de pelear en serio!