Signos Etéreos, Tercer Tomo: Capítulo 27

Estas ultimas semanas había olvidado estado ocupado trabajando en una historia corta de terror que se me ocurrió de imprevisto y esperaba tenerla lista para publicarla por estas fechas, pero como no logré terminarla a tiempo, decidí tomármelo con calma y publicarla cuando esté lista, lo que con algo de suerte ocurrirá poco después que termine de publicar el final de Signos Etéreos. ¡Nos vemos la próxima semana, eso espero, con otro nuevo capitulo! 

Nombre: Jacs Rengard
Residencia: Pueblo Sunabi

Jacs es un joven que fue criado por su madre y por sus abuelos en una granja en las afueras del pueblo Sunabi, situado a las orillas del bosque gris, por lo que se le considera uno de los asentamientos humanos más remotos. Aprendió el arte del combate con espada de su abuelo, quien desde pequeño tomó el papel de su padre después de que éste muriera repentinamente. Las razones de su muerte nunca le fueron revelta años después.

A la edad de 17 años su abuelo también muere en extrañas circunstancias por un asesino misterioso, lo que lo hace emprender un viaje para vengar la muerte de su querido abuelo. Es así como empieza su aventura…

Nombre: Kira Lenndraken

Residencia: Ciudad Paragon

Criada en el seno de una familia de hechiceros respetables de clase alta, aprendió desde muy temprana edad a usar la magia gracias a un riguroso entrenamiento para estar a la altura de las expectativas de su padre, quien antes de que ella y sus hermanas nacieran ansió tener un hijo varón que siguiera sus pasos para formar parte del consejo mundial de hechiceros.

Fuera de su carácter impaciente y temperamental, es una disciplinada estudiosa de la magia. A pesar de dominar y conocer muchos tipos de magias se especializa en magia de agua, a la que ha dominado a la perfección. 

Nombre: Valtron Molvus
Residencia: desconocida

Caza recompensas errante de pasado misterioso. Conoció a Jacs y a Kira luego de que Fragar lo contratase para matarlos, aunque durante la búsqueda de las esencias se unió al grupo renunciando así a Fragar, para luchar en su contra.

Es un personaje balanceado que emplea la espada y hechizos en combate a costa de no tener ninguna especialización.

Nombre: Xolfia Deltariz
Residencia: El templo de la luz

Huérfana de pequeña, fue acogida por los sabios del templo de la luz. A una muy corta edad fue instruida en el uso de magias espirituales y psíquicas. Posteriormente aprendió los secretos de la magia de la luz y con ellos partió en lo que sería su primer viaje como misionera para convertirse en sacerdotisa.

Nombre:  Blarg Bandak

Residencia: desconocido

Guerrero formidable en el combate y portador de la legendaria armadura negra, una de las últimas armas legendarias conocidas. Su padre robó la armadura de Fragar, e intentó usar a su hijo para derrotarlo, pero cuando Blarg se reveló, lo asesinó. De carácter frío y solitario, contrasta con la camaradería de los demás integrantes del grupo, aunque brinda un invaluable apoyo en combate, ya que al lado de Jacs ambos forman un poderoso dúo.

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Capitulo x27

Habiendo derrotado a los cinco guerreros galácticos enviados por Galiax, Jacs y sus compañeros lograron llegar hasta la torre secreta, que se encuentra en lo profundo del bosque gris y con ello, la batalla final está cerca.
 
Jacs y el resto permanecen escondidos detrás de los árboles observando la actividad que se lleva a cabo dentro de la fortaleza que rodea la torre. Puede verse a decenas de personas trabajar sin descanso para terminar la edificación. En el centro del lugar se alza la torre más alta, que sirve de morada a Galiax.
 
Jacs mira atentamente la construcción. –Esa gran torre de en medio debe ser donde se encuentra Galiax.
 
Kira –Parece que toda esa gente está bajo la influencia del poder de ese niño y los usa para construir su fortaleza.
 
Xolfia –Pobres… incluso ha obligado a mujeres a trabajar para él.
 
Blarg entonces se levanta de entre los arbustos,  revelando su posición momentáneamente.  –Si ese es el único obstáculo que nos separa de ese niño endemoniado, entonces yo me encargaré de ellos.
 
Kira de inmediato lo hace bajar a la fuera antes de que alguien lo vea. -¿Estás loco? ¡¿Acaso piensas atacar a gente inocente?!
 
Cuando Blarg parece perder los estribos Valtron interviene: –Si me lo permiten, yo arreglaré este asunto.
 
Dicho esto, pone su mano en el suelo y junta energía de tierra que trasmite hacia el suelo. Entonces comienza a sentirse una leve oscilación debajo de ellos. -¡HYPER GRAVEDAD!
 
En un instante, todos los hombres y mujeres que se encontraban cerca caen al suelo y se quedan pegados a éste como moscas en una trampa pegajosa debido a la fuerte gravedad. Aprovechando el momento, ellos cruzan entre las personas sin ser afectadas por el hechizo hasta llegar al otro lado.
 
Kira -¡A eso llamo usar la cabeza, Val! –lo felicita mientras caminan haciéndolo sentir incómodo.
 
Al toparse con la puerta principal de la torre, esta se abre de inmediato. Apenas logran entrar, una luz cegadora los envuelve, y en lo que dura un parpadeo se ven transportados hacia la parte más alta de la torre, frente a unas puertas que dan hacia el cuarto principal del complejo. De pronto las puertas se abren.
 
Al entrar se encuentran cara a cara con Galiax, quien los observa sentado desde su silla con aspecto aburrido. –Veo que se tomaron su tiempo para llegar hasta aquí. Por fin volvemos a vernos las caras. Me alegra que hayan llegado justo a tiempo para poder asistir al último espectáculo que estoy por dar comienzo y en el que ustedes forman parte del acto.
 
Blarg da un paso al frente, desafiante. –No he venido a jugar contigo, Galiax. Si no me entregas de inmediato lo que he venido a buscar ¡te destruiré!
 
Galiax -¿Y se puede saber cómo piensas hacer eso? –pregunta con una mirada burlona.
 
Sintiéndose humillado y sin poder contenerse más le ataca con todas sus fuerzas. -¡CHOQUE DE IRA!
 
El ataque de Balrg golpea directamente a Galiax, pero no logra hacerle ningún daño aparente.
 
Sin dejar de sonreír, Galiax finalmente dice: –Veo que están ansioso por pelear.
 
Jacs –Antes que nada, quiero que nos aclares el por qué nos conoces a mi, a Kira y a Valtron.
 
Galiax  -Eso es muy simple: Seguramente ustedes ya saben que ese anciano que conocieron durante su visita a M-17 creó copias mías, ¿no es verdad?
 
Kira –Eso ya lo sabemos. Pero, ¿por qué sabes todo eso? Jamás te vimos o sentimos tu presencia cuando peleamos contra Quázar.
 
La sonrisa de Galiax se desvanece mientras cuenta su versión de los hechos: Durante la mayor parte de mi vida había sido confinado a una pequeña prisión de cristal, pero a pesar de estar preso, podría ver y sentir a través de mi mente lo que mis copias experimentaban.
 
Jacs -¡¿Cómo?!
 
Galiax –En otras palabras, yo experimentaba todo lo que Quáza y Gamma sentían como si fuese mi propio cuerpo.
 
Valtron –Eso significa que estás al tanto de todo lo ocurrido en M-17.
 
Galiax –En efecto:
 
“Después de que ustedes mataron a mis copias, la fuerza que ellos me habían robado regresó a mí, debido a esto pude escapar de la prisión en la que me encontraba. Tenía una segunda oportunidad para retomar el puesto que me pertenecía como el legítimo elegido de la magia galáctica para gobernar el universo. Pero al despertar de mi sueño me di cuenta que el haber permanecido tanto tiempo en ese estado de animación suspendida me había privado de muchos de mis poderes y que quizás jamás podría recuperalos”.
 
Kira –Ahora entiendo... es por eso que buscas las piedras del legado del cielo, ¿no es así? ¡Quieres restaurar tus poderes!
 
Valtorn –Un momento. ¿Cómo supo que las piedras se encontraban en este planeta?
 
Galiax –Las piedras se encontraban alojadas originalmente en mi planeta natal: el planeta Gaia, y es precisamente allí en donde me enteré de su localización actual. Debo reconocer que me sorprendió saber que el lugar en donde se encontraban las piedras del legado del cielo fuera también el hogar de quienes me liberaron. Esa es la razón principal por la cual aún se encuentran respirando en estos momentos; no deberían considerarme como un enemigo.
 
Blarg – ¡Cómo puedes decir eso cuando intentaste que Jacs y yo nos matásemos entre nosotros en esa dimensión!
 
Galiax –¡Ustedes intentaron desde un comienzo interferir con mis planes! Pero descuiden, estoy dispuesto a hacerles una oferta: si se unen a mí como mis nuevos sirvientes, no sólo continuarán con vida, sino que serán recomenzados con la vida eterna y poderes con los que sólo soñarían.
 
Valtron -¡Eso nunca! No seremos tus sirvientes, Galiax.
 
Galiax –Comprendo… Entonces, no me queda más remedio que matarlos.
 
Con un grito ensordecedor, Galiax libera una tremenda cantidad de energía que los toma desprevenidos. Segundos después la habitación en la que se encontraban desaparece tras una violenta explosión. Jacs y los demás logran salir por una ventana a tiempo gracias a una burbuja mágica de Kira que los deposita sanos y salvos en la base de la torre.
 
Galaix no tarda en reaparecer desde la cima con un gran salto al suelo. Entonces, sin apartar la vista de ellos, crea una esfera de energía en su mano derecha mientras les advierte: No pueden decir que no les di una oportunidad. Ahora todos perecerán bajo esta torre. Presencien el poder del verdadero poder de la magia cósmica. ¡ONDA GALÁCTICA!
 
La poderosa onda de poder se expande en todas direcciones, destruyendo todo a su paso; desde árboles hasta las personas que se encontraban cerca. Al mismo tiempo, Xolfia logra sacar al grupo de allí transportándolos a un sitio seguro sólo para contemplar de lejos los efectos destructivos que la onda de choque de Galiax provoca, muy similar en fuerza a la explosión de una bomba atómica.
 
Xolfia aparta la vista de inmediato incapaz de presenciar semejante carnicería.
 
Cuando todo termina, sólo queda un enorme espacio vacío en un área circular alrededor de los escombros de la torre. Galiax entonces vuela hasta ellos.
 
Kira -¡Maldito! Esas eran personas inocentes. –le reclama furiosa apenas lo ve.
 
Sin asomo de emoción Galiax le responde. –Son simples organismos reemplazables de los que abundan en todas partes en este mísero planeta. No veo el por qué de su enojo.
 
Jacs –No me importa quién seas. ¡No tienes el derecho de quitar una vida! ¡¡Ataquen!!
 
Los cinco unen sus fuerzas conjurando poderosos hechizos con los que planean atacar a Galiax, quien no parece conmovido por sus palabras.
 
Jacs -¡LANZA DORADA!
 
Kira -¡MAREMOTO ÁRTICO!
 
Blarg -¡ANTIMATERIA!
 
Valtron -¡X-WIND!
 
Xolfia -¡LUZ EXCELSA!
 
Galiax ni siquiera se molesta en moverse o en protegerse cuando los ataques lo alcanzan. La fuerza con la que todos los conjuros combinados es tal, que forma una explosión casi tan grande como la generada por Galiax. Todos guardan silencio en espera que el polvo levantado por el ataque revele si sus esfuerzos fueron efectivos. En poco tiempo se distingue una pequeña figura caminando hacia ellos emergiendo de entre el polvo.
 
Jacs –Ni siquiera se molestó en esquivar nuestros ataques. ¡¿Cómo es posible?!
 
Valtron se acerca a Kira y le susurra al oído: –Si tienes algún truco de magia nuevo Kira, éste es el mejor momento para utilizarlo.
 
Con el rostro perlado en sudor, ella le responde con angustia: –A-a decir verdad, no creo que ninguno de mis hechizos puedan hacer efecto en él sin importar lo poderosos que sean.
 
Galiax –Bien, ya que ustedes tuvieron su oportunidad, es tiempo de hacer mi movimiento.
 
Con un rápido movimiento, Galiax crea una segunda ONDA CÓSMICA que los toma por sorpresa sin darles tiempo de escapar. La onda expansiva los atrapa a todos lanzándolos por los aires. En el último instante Xolfia logra crear una barrera de luz con todo su poder mágico salvándoles así la vida a sus amigos, quienes a pesar de ello resultan heridos tras recibir de lleno la onda de choque.
 
Jacs es el primero en recobrar la consciencia al escuchar los alaridos de Valtron, quien se encuentra tirado en el suelo cerca de él, tratando de reincorporarse al igual que el resto de sus amigos.
 
Xolfia -¿Están todos bien? –les pregunta con angustia.
 
Blarg es el primero en ponerse de pie. –No cabe duda que es un verdadero monstruo... Ni usando nuestros más poderosos hechizos combinados lograron hacerle el menor rasguño.
 
Kira –Descuida Blarg. Aún no hemos utilizado nuestra última carta: las criaturas astrales.
 
Jacs -¡Es verdad! Si las invocamos, la fuerza de nuestros hechizos aumentará considerablemente.
 
Blarg –Entonces, ¡hagámoslo!
 
Los cinco se recuperan rápidamente y cada uno comienza una invocación que llama a una criatura diferente. El eco de sus voces se entremezcla al igual que el aura de poder que los rodea:
 
Jacs -Brillante resplandor que desciendes de los cielos...
 
Kira -Azul cristalino de eterna perpetuidad...
 
Valtron -Madre de toda cosa viviente...
 
Blarg -Emerge de entre la destrucción que has creado...
 
Las energías se densifican formando a un lobo blanco de ojos rojos invocado por Kira, un rinoceronte de piedra invocado por Valtron, el arcángel de luz invocado por Jacs y la bestia oscura de Blarg. Galiax se limita a reír levemente al ver a las imponentes criaturas clavar sus ojos en él.
 
Galiax –Tal parece que mi pequeña demostración sobre mis temibles poderes les ha obligado a tomar medidas desesperadas, pero utilizar esas criaturas no les servirá de nada conmigo. Saben muy bien que si yo lo deseara podría romper el vínculo que los une a esas criaturas en cualquier momento.
 
Sin inmutarse ante sus amenazas, Kira manda al lobo a atacarlo. Galiax extiende su palma al frente en el momento en el que la criatura hecha de energía de hielo está a punto de devorarlo, y cuando su mano hace contacto, el lobo de hielo se desintegra en el aire hasta que no queda nada de él. El símbolo de hielo que se había formado debajo de los pies de Kira se destruye simultáneamente.
 
Valtron aprovecha el momento intentando atacar a Galiax con su criatura astral por detrás, pero cuando el rinoceronte usa su cuerno para embestirlo él lo toma con una sola mano y también lo hace desaparecer, convirtiéndolo en polvo.
 
Blarg -¡Haber si puedes conmigo!
 
La bestia oscura ataca a Galiax por debajo de la tierra y lo devora con sus fauces. No pasa mucho tiempo para que una luz muy intensa se genere en el interior de la criatura hasta que la bestia es consumida enteramente por esta energía. Blarg, que estaba muy cerca de allí también es afectado por la luz, que cuartea el peto de su armadura.
 
Jacs -¡Blarg! –exclama preocupado al ver a uno de sus compañeros más fuertes ser derrotado tan fácilmente.
 
Galiax emerge de entre la luz cuando  ésta se extingue, exhibiendo una amplia sonrisa. –Los venceré uno por uno para que sea más divertido. Entonces será su final. Dicho esto se mueve a gran velocidad  hacia Kira, quien es golpeada por una onda de choque de energía pira que Galiax genera sobre ella hasta dejarla inconsciente y muy mal herida.
 
Jacs trata de correr hacia ella para intentar auxiliarla, pero Xolfia se le adelanta: -¡Kira! –
 
Xolfia coloca sus dedos sobre el cuello de Kira para sentirle el pulso. -…parece que aún está viva.
 
Al ver a Blarg, que también está debilitado le hace una petición: –Xolfia, ¿podrías curarlos a ambos?
 
Xolfia duda unos instantes  -E.. eso creo. Mientras no mueran, puedo sanar sus cuerpos, pero me tomará unos minutos.
 
Jacs –Haz lo que tengas que hacer. Yo me encargaré de Galiax mientras tanto. –tras lo cual corre en dirección a Galiax.
 
Al verlo pasar a su lado, Valtron le pone la mano e intenta detenerlo. – ¿Qué intentas hacer? Sabes que no podrás enfrentarte a él solo.
 
Jacs le responde con una mirada seria para después continuar su camino hasta quedar frente a Galiax. –Eres un monstruo... y es por eso que por más fuerte que seas, no puedo tirar la toalla y rendirme sin dar pelea. Sabía que no tendría más alternativa que hacer esto. ¡Por eso daré mi vida con tal de destruirte!
 
Jacs pone su mano derecha al frente y prosigue a mostrar la gema de su tesoro, cuyo resplandor dorado lo cubre por toda la superficie de su piel.
 
Valtron –Pero, ¿qué está intentando hacer? –se pregunta en voz alta al verlo.
 
Entre tanto Xolfia continúa su tarea al curar las heridas de Kira, quien en esos momentos se encuentra en un estado de semi-consciencia. Con los ojos entrecerrados logra ver a Jacs ser cubierto por la energía dorada.  –Jacs… no… lo... hagas… -murmura al filo de la incosnciencia.
 
Del tesoro de Jacs emerge la esencia de luz, que toma inmediatamente con la misma mano y la sostiene frente a Galiax: –Esencia de luz: te entrego mi vida a cambio de que des todo tu poder. Cumple mi deseo y libera a la tierra de la oscuridad. ¡Hago contigo el pacto prohibido para ser uno contigo!
 
El resplandor de pronto se hace más intenso hasta ser tan luminoso que puede verse desde cientos de kilómetros a la redonda. Por primera vez desde el comienzo de la batalla Galiax muestra signos de sorpresa. –Su... ¡su energía está aumentando! ¡¿Cómo es posible que tenga tanto poder?!
 
De pronto, la luz baja su intensidad hasta que sólo queda un aura alrededor de Jacs, quien desenfunda su espada la cual se llena de energía de luz.
 
Jacs –He venido explícitamente aquí para hacerte pagar por todo lo que has hecho, Galiax, y si tengo que irme de este mundo, ¡te llevaré conmigo!