Ya
que estoy trabajando de tiempo completo en mi próximo proyecto como para
ocuparme de hacer nuevas ilustraciones, se me ocurrió que sería una buena idea compartir
un poco de mí filosofía de vida en este
espacio, así que estaré escribiendo de tanto en tanto consejos de vida que
espero les sirva para aplicar en la vida diaria empezando con una pequeña
introducción a lo que es la filosofía y el hábito del cuestionamiento. Como siempre,
sus comentarios son bienvenidos.
La importancia
del cuestionamiento
Para
muchos el conocimiento es el acumulamiento sistemático de datos adquirido a
base de constante repetición y confirmación. O dicho de otro modo: repetir
mentalmente una y otra vez los mismos datos hasta que se nos graban en la
memoria, pero lo cierto es que el conocimiento no nos sirve de nada si sólo
memorizamos fechas para pasar los exámenes.
La
filosofía, actividad ancestral de muchas culturas y que tuvo su auge en la antigua Grecia ha dejado
de tener utilidad al ser desplazada por la ciencia moderna, pero lo cierto es
que más que traernos dudas la filosofía es una herramienta que nos ayuda a
tomar nuestras experiencias, nuestro conocimiento y nuestro juicio para
aplicarlo a un problema y encontrarle una solución práctica.
Para
las personas de hoy es muy fácil tomar decisiones precipitadas sin medir las
consecuencias de sus propios actos, o bien, creer que un problema sólo tiene
dos respuestas: una correcta y una incorrecta.
El
uso del cuestionamiento nos sirve en la vida diaria de muchas formas, desde el
campo laboral, el social, el amoroso y hasta el personal. Preguntar el por qué
de las cosas y hacerlo un hábito nos abre una gama de posibilidades que de otro
modo no podríamos apreciar. Desafortunadamente, en las sociedades modernas no
se preocupan por enseñarnos a practicar la filosofía desde temprana edad
dándole prioridad a otros campos como las matemáticas y la educación cívica. En
este último caso a un niño se le dice que debe respetar a los demás, pero no se
le indica el por qué; mucho menos se le hace pensar la razón de por qué no es
correcto hacer el mal a otros.
Los
beneficios de hacer preguntas
¿Qué
cambios veríamos en una cultura que tiene el hábito del cuestionamiento? Para
empezar su gente sería menos crédula. Está comprobado que los seres humanos
tendemos a creer más que a desconfiar de lo que otros nos dicen, y es por esto
que en temas como la propaganda política, los medios masivos de información y
el marketing sacan provecho de ello para su propio beneficio.
Empezaremos
por hablar del marketing:
Tomemos
por ejemplo el caso de este producto en el que se apela a la masculinidad del
consumidor para hacerlo sentir seguro de sí mismo. Treta que se ha vuelto
habitual en los últimos años. Incluso existe un producto exclusivo para mujeres que usa la formula opuesta.
En
esta campaña de una famosa compañía refresquera podemos ver que el mensaje va
dirigido para conmovernos. Esto es para distraernos del verdadero objetivo del
comercial que es vendernos un producto a través no de una necesidad, sino de un
sentimiento de empatía.
Es importante recordar como persona y en especial como consumidor uno nunca debe de perder de vista el hecho de que las empresas no son los amigos que aparentan ser, que no se preocupan por el bienestar de sus clientes, o por ofrecerte el mejor servicio. Una empresa siempre buscará sacar beneficio para ella misma antes que cualquier otra cosa.
Si
aprendemos a poner objetivamente las cosas y buscamos los productos que
realmente necesitamos y nos convienen. A comprar un producto cuando realmente
queramos consumirlo, no cuando ellos quieran que lo hagamos. Si se siguen estos
sencillos pasos dejaremos de ser un blanco fácil de las noticias amarillistas y
de este tipo de campañas para convertirnos en consumidores inteligentes.
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